Con la llegada del calor es inevitable imaginar nuestra piel bronceada por el sol, y es totalmente normal que hagamos todo lo posible para conseguirla. Hoy te vamos a dar las claves para alcanzar ese dorado sutil, bonito y saludable que a muchas nos cuesta, eso sí, siempre con protección solar para cuidar nuestra piel.

Los días soleados ya están aquí y nuestra mente ya está en la playa, de vacaciones y presumiendo de piel bronceada y outfits veraniegos. Si tú también estás en nuestro mood sigue leyendo que esto te interesa.

Debemos recordarte que es imprescindible proteger la piel del sol a cualquier hora del día y más durante el verano, ya que conseguir un bonito bronceado no está reñido con proteger de manera óptima nuestra piel. Es más, te contamos que es un paso imprescindible para que nuestro tan deseado moreno caribeño no se convierta en un bronceado insalubre y carbonizado.

Hemos venido a ponértelo fácil con este post, si quieres conseguir el bronceado perfecto lo mejor es que tengas en cuenta estos cinco consejos con los que no sólo lucirás una piel dorada y luminosa, sino que también le estarás aportando a tu piel todos los cuidados específicos que necesita durante los meses de más calor.

Porque una piel sana y protegida se traduce en una piel con un bronceado bonito y saludable.

1. Sí o sí, exfoliación.

Al igual que retiramos el exceso de células muertas de la piel del rostro con una exfoliación, es importante realizar este mismo proceso en nuestro cuerpo.

Lo ideal es exfoliar la piel 3 días antes de tomar el sol para remover estas células y estimular la circulación, de esta manera la estamos preparando para que el bronceado sea más uniforme y duradero.

Así pues, durante el verano exfoliar la piel una vez por semana nos ayudará a mantenerla suave y con un tono bronceado igualado y luminoso.

Un paso esencial que, sin duda, va a hacer que tu piel esté lisa, ayudando a minimizar el aspecto de las finas líneas de sequedad, que además se acentúan por la pérdida de hidratación tras la exposición solar.

2. Alimentos Clave

La alimentación influye en el bronceado, y realizar una alimentación rica en betacarotenos nos va a ayudar a potenciar el moreno que queremos conseguir para esas ansiadas vacaciones, debido a que contribuye en la producción de melanina que es la que da el color a la piel.

Se recomienda consumir zanahoria, albaricoque, naranja o calabaza unas 3 veces al día 15 días antes de empezar con la exposición solar.

Además de esto, ingerir a diario alimentos con vitamina C, como la acerola, el limón y la naranja; ayuda a combatir los radicales libres, que son los responsables del envejecimiento de la piel, consiguiendo así mantener una piel bonita y saludable.

Finalmente, si todo ello lo complementas con nutricosmética solar, la protección y cuidado de tu piel será óptima. Te recomendamos Photo Protect caps, las cápsulas que protegen la piel de los efectos dañinos de los rayos UV*

La dosis diaria recomendada es de 2 cápsulas y se recomienda comenzar a tomarlas 1 mes antes de la exposición solar intensa.

3. Modera la exposición al sol

Por suerte, en la actualidad, se tiene un concepto de belleza y salud de la piel diferente y somos más conscientes del daño que pueda causar el sol en nuestra piel respecto a hace unos años.

El moreno perjudicial e insano que quería conseguirse hace un tiempo, ahora se ha convertido en la búsqueda de un bronceado sutil y saludable.

Lo recomendable para la salud de la piel y conseguir un bronceado bonito es limitar el tiempo de exposición solar a un máximo de 30 min, de manera que evitaremos que la piel se queme, consiguiendo un bronceado gradual y más duradero en el tiempo.

Además, es importante saber que, la piel tiene memoria y si quieres evitar complicaciones a largo plazo, es importante reducir el tiempo de exposición al sol, evitando sobre todo horas donde el sol aprieta con más fuerza, entre las 12 y las 16h.

Durante este periodo, los rayos solares tienen una incidencia más directa y, por lo tanto, el riesgo alto de sufrir quemaduras solares es mayor.

Una piel bronceada puede ser muy bonita, pero para que sea saludable y no envejezca de forma prematura, lo más aconsejable es tomar el sol durante las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde.

4. Protección solar

Como ya te hemos adelantado, la protección solar es parte esencial del proceso de un bronceado saludable y bonito. Aplícate un protector solar adecuado para no causarle daños irreparables.

Por consiguiente, es de suma importancia proteger la piel todos los días del año, pero incidir, sobre todo, en la reaplicación de protector cuando vamos a exponernos al sol.

Para realizar una exposición solar segura, responsable y adecuada lo recomendable es utilizar un factor de protección alto de entre 30 y 50+.

Si quieres lucir un bronceado y una piel saludable con la mejor cosmética, elige un protector solar de alta gama que no solo proteja tu piel también que, proporcione una acción antiedad global.

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5. Hidratación post exposición solar

Es necesario aplicar un after Sun o una crema hidratante corporal tras la exposición al sol. Lo ideal es que apliquemos esta hidratación en forma de bálsamo o crema reparadora el mismo día tras la ducha y que la reapliquemos todos los días.

Una buena cosmética de hidratación para después del sol, nos ayuda a conseguir ese tono dorado tan deseado de forma más rápida y además disminuye los efectos nocivos del sol.

Te recomendamos el After Sun de la colección Sun Beauty, refrescante con gran poder reparador que calma e hidrata en profundidad gracias a su alto contenido en aloe vera y aceite de maracuyá.

Ya sabes, alimentos ricos en betacarotenos, exposición solar moderada, exfoliar la piel antes del sol, protección solar durante la exposición solar y un extra de hidratación después… y di ¡hola al bronceado perfecto!